por Velloso, C. Rosalee Ewell

Quizá parezca que Hebreos sea un libro complejo y difícil de estudiar, pero no es así. Es tiempo de que la iglesia latinoamericana preste mucha atención a las profundas y transformadoras palabras de este texto sagrado. Vivimos en una época de nominalismo cristiano, de individualismo ajeno al llamado divino de abogar por la justicia y la paz, y de arrogancia religiosa. La carta a los Hebreos apunta hacia el sacrificio de Jesús y hacia Cristo como el único ser humano por el que efectivamente llega la justicia de Dios a nosotros. Hebreos nos desafía a repensar nuestras lealtades y nuestro compromiso con la fe en Jesucristo, y a todos aquellos que nos llamamos discípulos de Jesús nos muestra el camino que debemos seguir. De manera que, aun con todo el misterio y las dudas que giran en torno al origen de esta carta y de su lugar en la antigüedad, no cabe duda de que sus palabras son tan relevantes hoy para nosotros como lo fueron para sus primeros lectores.

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